viernes, 17 de diciembre de 2010

Cuando el deseo es mayor que el tamaño



A lo largo de la historia de la NBA, ha habido un tipo de jugador en particular que siempre me ha fascinado. Son gente como Dennis Rodman, Anthony Mason, Larry Johnson, Charles Oakley, Antonie Carr, Buck Williams, o Charles Barkley. ¿Qué tienen de particular estos jugadores?.


Por circunstancias del juego, son jugadores cortos de estatura para la posición que luego ocuparon en la cancha, la de 4 o 5, pero cuya intensidad en la pista les convertía en peligrosos reboteadores. Es cierto que Charles Barkley era un caso especial, que en sus tiempos de juventud en Philadelphia y posteriormente en Phoenix, Charles era un "todocamino" que hacía lo que quería sobre el parqué. Su movilidad por la cancha era completamente abismal, era un jugador peligroso desempeñando cualquier papel, penetrando desde el exterior, tirando desde el perímetro, distribuyendo el balón desde el poste, jugando de cara, jugando de espaldas al aro, etc. Pero al igual que los otros jugadores que he citado, Charles se caracterizaba por, oficialmente, ser un 4. Un ala-pívot versátil y luchador, pero también muy talentoso,  una máquina de rebotear ante auténticas torres de más de 2.10 metros. Todo esto midiendo poco más de 1.98m.
De entre este grupo de jugadores, mi favorito "de siempre" es Dennis Rodman. Dennis, probablemente es de los jugadores más infravalorados de la historia en cuanto a reconocimiento o galardones se refiere. Es cierto que en la faceta ofensiva, sobre todo en su etapa en los Bulls de Chicago, era prácticamente inexistente su labor de cara a la anotación, es más, ni era lo más habitual que el balón pasara por sus manos a la hora de construir el juego del triángulo ofensivo. Para eso ya estaban otros "estilistas" de la calidad de Scottie Pippen, o Toni Kukoc. Rodman mide oficialmente 6'6 pies, o lo que es lo mismo, 1.98 metros. Con esa estatura, fue capaz de liderar la liga en promedio de rebotes por partido durante 7 años consecutivos. Lo consiguió en una época dónde había grandes reboteadores en plenitud de condiciones: Alonzo Mourning, David Robinson, Shaquille O' Neal, Patrick Ewing, Karl Malone, etc., llegando a promediar en la temporada 1991-1992 la friolera de 18.7 rebotes por partido. Asombroso.

Mucha gente hoy en día sigue preguntándose si la habilidad para el rebote es algo que se puede entrenar, o es más bien algo innato. Es obvio que el rebote debe trabajarse, que hay conceptos muy importantes, como el timing de salto, la colocación, cerrar a tu adversario, cómo recoger el balón, etc. Sin embargo, la habilidad más importante para el rebote, el deseo, es algo casi innato, algo que tenemos dentro y surge por si solo, o fruto de la motivación, es un tesoro que hay que inculcar a todo joven que esté formándose como jugador, ya que por muchos cambios que experimente el baloncesto, hay algo que nunca cambiará: si se falla un tiro, alguien tiene que atrapar el balón.

Un nuevo jugador llama a la puerta de este grupo. Es un jugador distinto a los demás, no es un titular, ni su estadística en el apartado de rebotes es espectacular, tan solo 5.7 reb. pp. Sin embargo, cumple de sobras los requisitos para, con menos calidad que muchos de los grandes centers que patrullan las zonas de la NBA, ser miembro del club de los jugadores que nunca se rinden, los jugadores que al margen de sus desventajas físicas, tienen un arma con la que contrarrestar cualquier obstáculo que se cruce en su camino. Su nivel de deseo, ganas, intensidad y lucha, es muy superior a la media. Es Glen "Big Baby" Davis.
El caso de Glen Davis en la NBA actual es digno de ser comentado, es un rara avis que recuerda gratamente a ese grupo de 4's "bajitos" que deleitaban en los 90', no por convertirse en "pseudo aleros" de hoy en día como Lamar Odom, Jeff Green, o Chris Bosh, sino por no renunciar a que su misión es fajarse contra cualquier "monstruo" que se les ponga por delante en la zona. Davis, oficialmente mide 2.06m. Lo primero que se me pasa por la cabeza al conocer su estatura "oficial", es que es una mentira tan grande como la corpulencia del propio "Big Baby". Glen no mide más de 2.02 o 2.03, es un hecho evidente, la prueba es que, Paul Pierce, compañero de equipo de Glen, mide oficialmente 2.03m y Davis, cuando está a su lado, parece medir lo mismo que Pierce, incluso menos. No es una diferencia de centímetros tan grande la que hay entre su estatura real y su estatura oficial, pero dentro de la cancha, son centímetros a tener en cuenta.

Glen Davis llegó a los Boston Celtics procedente de los extintos Seatle Supersonics (en el futuro ya les dedicaremos una entrada), que lo eligieron en el puesto número 35 del draft de 2007, junto con Ray Allen. Vamos que Davis era poco más que un "jugador de relleno" para que los Sonics pudieran hacerse con un tirador experimentado como Wally Sczcerbiak, Delonte West y la joven promesa Jeff Green (todavía sigue siendo una promesa, pero un poco menos joven), elegida en el puesto número 5 del mismo draft, por los Celtics de Boston. Sorprende que la llegada de "Big Baby" a la NBA, fuese en una posición tan baja en el draft, cuando, sin tener facultades de estrella, si que promedió números más que interesantes durante su etapa universitaria en los Tigers de Louisiana State, promediando 17.7 ppp y 10.4 reb. pp.
Su primera temporada en la NBA, fue bastante "testimonial", participando poco en el juego del equipo, pero no pudo ser más provechosa tanto para su aprendizaje, como para el equipo, que se alzó con el título de campeón de la NBA, el 17o para Boston, 21 años después de jugar una Final y 22 desde su último título. Durante esa primera campaña, Glen jugó pocos minutos y aportó números discretos, pero ya daba muestras de una entrega y un deseo para hacerse con todos los balones sin dueño fuera de lo habitual.
Sus posteriores retos le acreditan como lo que es hoy, un jugador lleno de deseo. Un jugador que no da un balón por perdido y que no ve imposible capturar un rebote, por difícil que parezca. La temporada pasada su participación fue clave para que Boston regresara a la Final 2 años después de alzarse con el título contra los Lakers. Fue clave para dar descanso a un Kevin Garnett que jugó todo el año a un nivel por debajo de lo normal por culpa de los problemas físicos y fue clave para aguantar la serie final contra los angelinos hasta el séptimo partido, que sirvió para coronar a los Lakers como actual Rey de la NBA.
Lejos de conformarse con lo que ha conseguido Davis como sexto hombre, esta temporada 2010-2011 Davis sigue progresando. Juega alrededor de media hora por partido, promediando casi 6 rebotes por encuentro, aportando 12 puntos por noche, todo ello con unos porcentajes de tiro muy correctos para el tipo de jugador que es. Glen se ha ganado a pulso ser uno de esos jugadores que, de seguir así, serán recordados no por lo buenos que eran, ni por sus espectaculares movimientos, ni por ser el líder de su equipo, sino por el deseo y la ilusión por hacer el trabajo sucio bien hecho. El trabajo imprescindible para cualquier gran equipo. En definitiva Glen Davis, "Big Baby", ese grandullón simpático de los Celtics, con cara de niño y corpachón que en absoluto recuerda al de un deportista, tiene un deseo por jugar a baloncesto mucho más grande que su cuerpo y que, vale más que los centímetros que le faltan.  Probablemente porque, como desvelaban Daimiel, Lonkar y Carnicero durante las Finales de la temporada pasada, Davis comentó en una entrevista a la televisión estadounidense, que no le importa lo que la gente piense de él, porque cuando era un niño y estaba en el instituto, los compañeros se reían de él por lo gordo que estaba, pero a Glen Davis sólo le importaba una cosa, la misma que le importa hoy en día, que jugando a baloncesto, es feliz.

2 comentarios:

  1. Me gustan los articulos dedicados a los jugadores menos habituales, a los que no son grandes estrellas.
    Rodman ha sido uno de los jugadores mas inteligentes en pista que jamas he visto, nos enseñó a todos como se pueden minizar los defectos y maximizar las virtudes, y como un jugador debe saber lo que puede y no puede hacer, y en esto último Rodman fué el auténtico maestro. Pocas veces un jugador con sus limitaciones pudo llegar tan lejos.
    Lo de Davis no estan impresionante, es un tipo de jugador diferente a Dennis, pero es cierto que conserva ese halo de jugador sacrificado, peleón y con unas ideas muy claras de cual es labor.
    Recuerdo que en el anillo que ganaron los Celtics en 2010 los jugadores que ams dudas me planteaban eran Davis y Rondo, lo que son las cosas.

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  2. Hola!!

    ME ha gustado mucho esta entrada dedicada a Glen Davies, comparto tu opinión aunque yo sí creo que es más alto que Pierce, lo que psa es que no da esa sensación debido a que es menos "fino" que eĺ.

    Además de sustituto de KG,tiene movimientos de 5 muy buenos ye ste año ha jugado más de Center.

    Un saludo

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